miércoles, 29 de agosto de 2012

Y al final, el final y después no hay más


Nos besamos, nos quisimos, nos desnudamos, dormimos, comimos, viajamos y soñamos juntos.
Solo teníamos un camino y era el que  queríamos hacer de la mano.
Solo teniamos una cosa que defender, no soltaron durante la travesía.
Queríamos vivir el uno del aliento del otro.
Mordíamos la mano del que se  atreviese a ponernos en duda.
Nos dolían las mismas cosas, a ti las  mías y a mi las tuyas.
Lo poquito que  teníamos, nos lo dábamos el uno al otro y siempre con verdadera generosidad.
Nos buscábamos siempre que  estábamos cerca, nos pensabamos cuando nos separaban.
Nos matábamos por morir juntos cada noche.
Nos las apañábamos bien con poco y nada.
Nos marchabamos felices si nos prometiamos volver a vernos.
Nos abrazabamos y se nos hacia tarde enseguida.
Nos mirabamos y no necesitabamos palabras.
Nos hablábamos y nos adivinábamos las frases.
Y luego nada y ahora nada y mañana nada…
Después de darlo todo, lo que pasó es que nos quedamos en NADA

miércoles, 15 de agosto de 2012

¿Con miedo o sin él?


No te mentiría si te dijera que  no me muero por volverte a abrazar, pero tampoco te estaría diciendo toda la verdad, tampoco te podría decir con seguridad que si hay besos, quiero que me sepan igual.

Échale la culpa de mis dudas al miedo, él las tiene.

Miedo a sentir lo que sentía antes, ahora que ya ha pasado tiempo parece que todo esta en su sitio, pero solo lo parece, a veces las cenizas resurgen y me empiezo a quemar por dentro…¿Y si vuelve el incendio? ¿Y si tardo otros dos meses en calmarlo? Ni siquiera extinguirlo, solo controlarlo.

El miedo a que las heridas sin cicatrizar se vuelvan a abrir, si se abren tú no vas a estar para curármelas, y a mi ya no me quedan fueras para ello.

Antes cuando tenía miedo me bastaba con echar la vista a un lado y soñar, pero ahora cada vez que lo intento todo sueño es contaminado con realidad y se convierte en pesadilla.

Miedo a no volver a asumir un “Adiós”.

Te diré que también hay cosas que quiero que vuelvan con tu regreso, pero esas me las reservo.

Por @marimagdalenas_, porque si

De nada

Si me das a elegir me quedo con tu alma y dejarás de ser mediocre para no ser Nada… Pero a mi lado… Nadie. Yo no tengo nada. Sólo tiempo. Te lo puedo dedicar para que llenes la nada con tus besos para que tú, Nada, y yo, Nadie, compartamos al menos un latido y arrancar a dentelladas tu mediocridad y sentirme alguien por liberarte de tu estigma. Y tu sin estigma y yo sin tiempo y tu mi Nada y yo tu Nadie. Y ambos con un latido menos… Marcando la ciudad con un beso en cada esquina, no quiero pasar desapercibido contigo. No nos esconderemos de nadie y dejando recuerdos en los portales, en las barras de los bares, en los arboles del parque, en las noches sin estrellas, en las farolas apedreadas, en los pasos de peatón que nos verán cruzar de la mano sin prestar atención al trafico, por que por muy deprisa que vaya el mundo, notaras como te paro el tiempo, para que todos nos miren pero nadie nos moleste.

Por: @javilimonysal (nadie)

sábado, 11 de agosto de 2012

Un pellizco de felicidad.


Se subió en el vagón sin quitarse las gafas de sol, la melena despeinada, el brugal aun corriendo por sus venas y el ultimo rock'n'roll todavía retumbaba fuerte en su cabeza
El tren estaba prácticamente vacío. Dos señoras vestidas con pieles en los primeros asientos, tres o cuatro chicas que volvían de fiesta y algunos señores que marchan a trabajar. Y en el último asiento, él, que entre la música y la prensa gratuita del día ignoraba al resto de la gente.
Así que se fue al final y se le sentó cerca para que no le molestaran de señoras amargadas o risas de adolescentes recordando su maravillosa noche en la gran ciudad. Puso los pies encima del asiento y hecha un ovillo se puso a mirar por la ventana buscando algo que la hiciera olvidar lo que el alcohol no habia conseguido.
Él ya se había percatado de su carita de niña destrozada y disimulaba por pura timidez las ganas de acercarse y preguntar. Pero las miradas de reojo no pasaban desapercibidas.
En una de esas veces ella miro de casualidad para donde el estaba y lo vio volver la cabeza rápido hacia el periódico. Fueron varias la veces que lo vio hacer lo mismo y con una voz suave dijo sin mirarle a los ojos: 
- Eso que lees debe ser aburridísimo para que estés tan poco concentrado.
- Yo es que me distraigo con muy poquita cosa y la canción que estoy escuchando parece que se escribió para caras tristes como la tuya.
"Joder, ¿Tanto se me nota?" Pensó. Le dedicó una mueca a modo de sonrisa y añadió: 
- No me gusta ponerle banda sonora a los viajes de vuelta pero podria hacer una excepción.
- ¿Quieres un casco? Pero si vamos a compartir mi música, no quiero llantos, que dejé mis penas en la estación y no pienso cargar con las tuyas... Sonríeme.
Al principio no iba a aceptar pero la curiosidad de saber de que cancion se trataba actuó por ella... Empezó a escuchar y no pudo cumplir la condición de nada de llantos y una lágrima traidora rodó por su cara.
- Límpiate eso niña que me estas empapando la sección de contactos y estaba muy interesado en la chica esa que sabe varios idiomas... ¿Ves? Francés, griego...- Los dos comenzaron a reír.
Sin darse cuenta acababa de hacer algo que nadie habia conseguido n dias: hacerla sonreir.
Cogió su mano y le preguntó : 
- Cuéntame, que hace que una carita tan linda se ensucie con rimmel y me obligue a sacar los kleenex que pensaba vender en los semáforos de la gran vía.
Lo miró analizándolo de arriba a abajo: vaqueros desgastados, zapatillas sucias, una camiseta friki y esa barba que se fundia perfectamente con su desaliñada melena. 
- Uno como tú. Pero con peor gusto musical.-suspiró y añadió. -Debo tener una especie de imán o algo así. 
- Mira, ¿sabes qué hay en este bolsillo? Tengo aquí la formula de la felicidad... Pero para dartela tienes que pasar ciertas pruebas
- Acepto el reto pero te aviso que no se montar en bici, ni dar volteretas y canto fatal, asi que ponmelo facilito, moreno.
-Aprenderte está canción y cada vez que escuches El Perro Verde te vendrá a la cabeza este tren. En la próxima parada, me invitas a desayunar... Y enseñame a besar que es mi asignatura pendiente... Escoge el orden.
Se le acerco al oido y susurró: 
- "Soy el pellizco pa cuando te olvidas de mi". 
Después le cogió por la barbilla y juntaron sus labios. La lección de besar fue tan intensa que se saltaron la parada del desayuno.
Cuando anunciaron su parada, él sacó un papel del bolsillo y le dijo:
- Aquí tienes lo prometido. Pero leelo cuando te bajes. 
En la nota decía: Lo escribí por sí te sentabas cerca: 67654... Griego, francés y viajes en tren.

Por: @javilimonysal y @tiscarmar  

Que así sea

Si nos vamos a conocer, me gustaría que fuese en un bar.
Si me vas a coger la mano, que sea en un parque.
Si me vas a besar que sea en el cuello.
Si te quieres acostar conmigo, sera en cualquier pensión.
Si quieres que hablemos, nunca será de cosas serias.
Si quieres que te cante, será al oído, será una canción que se pueda acompañar con palmas.
Si me quieres bailar, que sea sin zapatos, sin prisa y sin pudor.
Si me vas a quitar algo, con ansia, la ropa.
Si nos casamos, que sea en las vegas, que la boda la oficie Elvis y la luna de miel sea con Champan, fresas, jacuzzis y camas con sabanas de seda y espejos en el techo de la suite y no probaremos suerte, porque los dos ya habremos ganado la baza que jugamos.
Si no queremos que amenzca y la noche dure 3 días, no levantaremos las persianas y nos alimentaran las ganas, el deseo y las miradas lascivas.
Si vas a dejar un recuerdo, me quedo con tu aroma, que evoca sentimientos y despierta el sentido de querer.
Si te quieres marchar, que sea sin despedidas ni rastros, sin pistas, que no te vuelva a ver.
Si te quieres quedar, que sea para siempre, no te voy a pedir nada y procurare que nada necesites pedir.

Si me voy a morir, que no sea sin haberte dicho te quiero, tan cerca, que lo escuches las noches que no pase contigo, como el eco del cariño incondicional e imperecedero que te regalo a cambio de que abras mis cartas y te sientas bien, sabiendo que yo estoy bien.

Por: @javilimonysal (sera lo que Dios quiera)

viernes, 10 de agosto de 2012

Joder, hoy me encuentro reflexivo.

En el tocadiscos no están las canciones que yo quería, y este bar no tiene whiskey. ¿Qué mierda de pub es este?.

Desde temprano dando tumbos con mi yowan, dos paseos por debajo de tu casa y 10 minutos después me di cuenta de que ya no tenía porque recogerte.
Son días que miro el calendario y sigo poniéndole X grandes en el calendario por cada día que paso sin ti, y sin acordarme. Creo que habrá dos o tres X puestas, de los dos o tres días que estuve durmiendo. Odio que pienses que nunca te quise, que te tenía como entretenimiento como me han dicho por ahí que pensaste, porque no sabes nada de mí, después de tanto tiempo, y eso me entristece, y creo que es por eso, porque quise que me conocieras y no lo conseguiste, esté de esta forma.

Si cuento mi historia, sé que nadie me creería.
Leyendas urbanas rulan sobre mí, sobre mis quéhaceres, pero nadie sabe de mí mas que mi nombre, pero sin mis apellidos.

Yo hablo por mí, y por todos mis compañeros (de este desierto de personas) para decir que no quiero más te quiero que parezcan sinceros, si luego me los vas a negar cuando más los necesite.

Y aquí está, mi amigo humeante saliendo por los recovecos de los barrotes de mi ventana. Sí, me dijeron que me comprase un amigo y me compré un Malboro; al menos tiene nombre.

La quiero el doble de lo que ella me echa de menos.
Me quiero la mitad de lo que la gente piensa.

Hoy , sobre todo, me siento mal. Hoy no sabré si soy Alex o quién. Hoy estaba escribiendo y me acorde de ti, tanto, que sentí que debería escribir más sobre mí.

Abriría mi mundo plasmado en literatura y aun así no me conoceríais... a la mitad os cansaríais y me daríais la patada, como todas las personas.

@AlexeyKovalski con amor.

jueves, 9 de agosto de 2012

Todas las cosas que pudieron ser.

Todas las veces que intente mejorar algo y lo rompí más.
Todas las promesas que hice y por falta de tiempo no pude cumplir.
Todos los miedos, las dudas y la curiosidad que despertabas en mi.
Todos y cada uno de los problemas que no pudimos resolver.

Todas las cosas que se encargaron de que ahora yo este así y no sepa como estás tú.

Por @Marimagdalenas_ .

lunes, 6 de agosto de 2012

Allí donde solíamos gritar.

Siempre aspire a oír un "Buenos días, princesa" mientras respiraba su aliento, aunque fuera cerca de las doce del mediodía.

Era y es raro sentir esa presión en el pecho cuando ves algo que te recuerda a él, un gesto de un amigo o esos dos CD's que siempre están en la mesa de mi escritorio, los cuales he escuchado mil veces por el simple echo de que fue él quien me los regalo, aunque me los sepa de memoria.

No porque haya pasado tiempo te quiero menos,  y porque haya distancia de por medio no te voy a olvidar primero.

Son extraños los nudos en la garganta de madrugada y absurdas las discusiones, al igual que ridículas las veces que intente que volvieras ami.

Lo peor de todo esto es que sé que te sigo queriendo por el dolor que me causas, no por sonrisas, ni abrazos.

Fue un duro golpe, si, pero hay más muros donde estrellarse e igual alguno esta en un prado blandito, pero al fin y al cabo nadie ha dicho que yo no estaré dispuesta a levantarme y subirme a este muro, otra vez.

Por @marimagdalenas_ , si quieres gritar ya sabes donde estoy.









domingo, 5 de agosto de 2012

Hablamos de sentimientos a prueba de balas.

Respirabas el aire de mi aliento. Nos reiamos hasta que nos ahogabamos, hasta que perdimos noches riendo. Fue el mejor momento de mi vida, aunque no dejé de dormir sola. Que nos queda el sabor de un nosotros cosido con unos te quiero a mi cama. Si, esa en la que nos besamos hasta robarnos el uno al otro el aliento. En la que los abrazos deshicieron las sabanas. Que mi almohada fue testigo de cuanto nos quisimos pero me prometió no confesar nada. Y el cenicero guarda el testimonio de todos los cigarros que nos fumamos para olvidarnos. Y después de ese último polvo no nos queda nada más que el consuelo de que nos quisimos como nadie se quiso. Y las falsas promesas de que nuestro amor era a prueba de balas.

Por la @MissPanic esa que a veces sin motivo, se pone a llorar.

Tu, yo, nosotros...

Me gustan las tormentas de verano y los días de sol en invierno.
Las putas recatadas y las señoritas golfas.
Los bares donde no se pone fútbol.
Los pubs donde no se pincha regueton.
Los parques donde los bancos están llenos de gente ociosa.
La cerveza en compañía.
Los viajes improvisados.
Las maletas vacías y los hoteles sin categoría.
Las canciones que no le gustan a nadie y me pongo pesado "nene escucha esto".
La gente que se ríe de todo, empezando por si mismos.
Los pintalabios llamativos que ensucian las camisas.
Los restaurantes donde los azulejos ya no están blancos y el camarero conoce por su mote a todos los clientes.
Me gusta la sinceridad, pero suelo mentir solo para reírme.
Me hace feliz que la gente que esta conmigo se ría.
Me siento afortunado de haber podido elegir a mis amigos y aunque me quedo con pocos, son los que yo quiero.
Me vida es triste y aburrida, pero no se la cambio a nadie, podría ser mejor, podría no ser yo, pero para eso están los demás y aunque parezca un poco narcisista, yo quiero llamarle amor propio y ahora que me quiero yo, estoy preparado para dejarme querer por los demás.

Y esta es la teoria absurda #3 "Antes del "yo" va el "tu" pero no descuides el yo."

por: @javilimonysal (yo)

sábado, 4 de agosto de 2012

Cásate conmigo.

- ¿Y qué quieres que haga si no me caen bien?
- Cariño... son importantes para mí...

Aquella alcoba era un búnker de gritos enlatados. Él era un solitario, obsesionado con su mujer, sólo quería a su mujer, se olvido de todo lo demás, que existía, que vivían personas a su alrededor... los humanos eran objetos para alcanzar sus fines y los de ella. Ella no podía estar siempre con él, era aburrido y no vivía solo para él, aunque éste no lo entendiese ella tenía una vida más alocada. Cómo se nota que se conocieron en internet. Tan diferentes...

- A ver, que no me apetece nada salir.
- Pero, nos están esperando Dylan.
- Ve tú, no te lo impido.
- Eres mi novio, y... ¿me vas a dejar sola?
- Nunca estarás sola, estarás con todos esos babosos que solo piensan en follarte.

Dignamente, se dio la vuelta, se vistió y se encerró en el baño. No salió de allí hasta dos horas después, su móvil estaba en el segundo cajón de la mesita de noche y sonaba cada diez minutos. Ni Dylan ni Amy estaban dispuestos a dar su brazo a torcer, aunque los dos pensaran que querían hacerlo.

- Amy...
- Dime.- fue una de las contestaciones más bordes de la relación.
- Lo siento...

Como si se tratase de un milagro... Dylan pidiendo perdón. No era mala persona pero era orgulloso, nunca reconocía sus fallos ni sus defectos, pero tampoco sus virtudes, no era humilde, era un hombre informatizado. Amy sabía que tenía que aprovechar la situación.

- ¿Lo sientes?
- Sí, lo siento... sal del baño por favor...
- Vale.

Con una sonrisa salió Amy del cuarto de baño y acto seguido entró Dylan, a hacer de vientre. Amy estupefacta, no sabe por qué pero tiene unas ganas de estrangularle que no pueden ser normales en una persona enamorada.

- Eres un hijo de puta Dylan.
- ¿Por qué? ¿Qué he hecho?
- Me has hecho salir del baño para cagar, ¿te parece bien?
- No lo he hecho por eso.
- ¿Entonces por qué? ¿Eh?

Se abre la puerta del baño, una de las losetas del baño está tirada en el suelo, y donde debería estar había un hueco donde Dylan guardaba todos los recuerdos con Amy, y de ella, saca una cajita, azul de terciopelo.

- Ábrelo Amy...

Sorprendida, abre la cajita en la que dentro había un anillo de compromiso...

- Amy, ¿quieres casarte conmigo?
- Te quiero Dylan.

El beso del sí, oh... ¿qué os voy a decir del beso del sí? los nervios de un sí que no se dice pero se intuye... son los mejores que una persona pueda tener en la vida.

Dios sigue apagado o fuera de cobertura.

Ahora sonrío por lo que antes lloraba, y lloro porque se que por lo que sonrío no va a volver a pasar. Anoche soñé contigo, con la luz que desprendía tu sonrisa cuando sentados en tu habitación me decía al oído que me querías y que te había cambiado la vida. Supongo que en estos momentos, en tu pensamiento tal vez sea a peor el cambio, pero quién sabe.
Tu mirada caoba, cautivaba e idiotizaba todos mis sentidos. Tenías algo especial que no he encontrado en otra persona, puede ser que tu me querías y aunque yo no quisiera darme cuenta, me lo demostrabas. Lo primero que te conté es que me encantaba que, sin motivo alguno, en una conversación de un tema que no tenga nada que ver: me pares, me beses, me digas te quiero al oído, y me mires a los ojos. En el fondo soy un romántico.
Ahora, ni te acordarás de mi, aunque dijiste que me echabas de menos, pero lo borraste, yo no, y lo sigo diciendo, aunque los besos ahora te los dé otro.

Rayadas mentales de @AlexeyKovalski

viernes, 3 de agosto de 2012

No creo en el amor pero querría volver a verte.

En mi almohada quedan resquicios de tu maquillaje de ese último día que te quedaste a dormir. ¿Te acuerdas?. Ese día corría el vino de tal forma que creíamos que teníamos a Jesús de Nazaret metidos en la pila del baño.
Ahora, paseas de la mano con otro tipo que dices que te da más amor que el que yo te dí, pero si me ves, entre el gentío mirándote con los ojos en carne viva, se la sueltas y te tocas el pelo mientras le dices "No, no, es que me sudan las manos, ahora te la doy..." con cara de circunstancia.
Yo mientras llevo la vida bohemia que deseé, entre drogas y risas con unos amigos temporales. No restriego mi saliva con cualquiera pero hoy no me importaría, en fin, tu hiciste lo mismo para olvidarme.

Y aquí, un 3 de Agosto, sigo mirando hacia atrás. 

Por: @AlexeyKovalski un día en el que se cagaba vivo.

jueves, 2 de agosto de 2012

Al final se trata de querer ver.



Y ahora, de frente y algo menos dolida te puedo decir que solo fuiste un espejismo, que no era insustituible, que ni siquiera eras la cuarta parte de lo que yo creía, que ni siquiera te merecías la mitad de los besos que yo un día te di.

No me mires así, no es rencor y mucho menos arrepentimiento, solo es que ahora, después de un tiempo se me ha caído la venda de los ojos.

Tantas lagrimas, tantas dudas, tantas noches en vela y tantas promesas incumplidas ahora ya son solo aire.

Por @Marimagdalenas_ en una calurosa noche de Agosto.